¿Qué hay que revisar en el coche antes de salir de vacaciones?

Todo el mundo se centra en la mecánica, dejando a un lado la documentación, lo cual es un error

EDDC.NET/Madrid

Ya están aquí las vacaciones y los desplazamientos se cuentan por millones, de manera que hay que revisar bien el coche con el fin de que vaya en condiciones y no nos amargue el viaje. En este aspecto, todo el mundo se centra en la mecánica, dejando a un lado la documentación, lo cual es un error. No llevar un documento nos puede estropear las vacaciones y además suele acarrear una buena multa.

¿Toda la documentación está en vigor?

Antes de salir hay que ver si la documentación está en vigor. Así, hay que mirar si la póliza https://www.allianz.es/seguro-de-coche.html sigue sirviendo, en qué fecha se renueva, si nuestro seguro nos ha mandado ya la carta con la renovación, etc. De entre todos los documentos, que el seguro esté en vigor es fundamental. Sin él, podemos enfrentarnos a problemas muy serios u otros más mundanos, como el que se nieguen a prestarnos asistencia en viaje porque no hemos renovado la prima.

También hay que hacer lo mismo con la ITV. No podemos circular con ella caducada y si la fecha en la que hay que pasarla coincide con la de las vacaciones, es mejor ir antes, a nuestra estación de confianza. A su vez, revisaremos que en la guantera está el permiso de circulación y la tarjeta de inspección técnica, pues nos pedirán estos documentos en cualquier control.

Por último, hay que ver si el carnet está en vigor. Se renueva cada muchos años, por lo que no es raro tenerlo caducado y no habernos dado ni cuenta.

Hay que inspeccionar la mecánica del coche

Con todos los papeles en regla toca hacer una revisión mecánica. La podemos llevar a cabo nosotros o ir a un taller, en donde mirarán el vehículo con más profundidad. Al ser verano, conviene que revisen el sistema de refrigeración, cambiando el líquido si es necesario. Lo mismo pasa con el climatizador, haciendo una recarga de gas si el taller así lo estima oportuno.

La batería es otro de los puntos que más sufre con el calor, así que hay que comprobar el funcionamiento y cambiarla si se tiene la más mínima duda sobre su estado. También se verifica si el alternador hace bien su función, algo que llevan a cabo en el taller con una máquina.  

Revisamos los exteriores

Hay partes del coche que se pueden verificar sin ser mecánicos. Por ejemplo, hablamos de las ruedas, las luces, la chapa, etc.

Las ruedas son las que nos mantienen pegados al asfalto, así que tienen que estar en buen estado. Aún les debe quedar dibujo y no hemos de ver ni grietas ni abolladuras. Aprovechamos la revisión para mirar las presiones e hincharlas si le falta aire.

Además, hacemos una comprobación de las luces. Vemos que todas funcionan y que no haya ninguna fundida, lo cual puede ser un problema de noche o a la hora de señalizar las maniobras. Del mismo modo verificamos el estado exterior de la chapa, los parachoques, los espejos, etc. Algo tan simple como una grapa de plástico rota puede hacer que el parachoques se suelte en plena autovía, lo cual no es agradable.