La ACP sostiene que la reducción de la deuda bancaria se realiza a costa de los portuenses

Lamenta el triunfalismo del gobierno local (PP-CC)

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

La Asamblea Ciudadana Portuense lamenta el triunfalismo del gobierno municipal (PP-CC) respecto a la reducción de la deuda del Ayuntamiento con los bancos, dado que no está repercutiendo en la población portuense ni contribuyendo, por tanto, a mejorar sus condiciones de vida. Para la formación asamblearia, la concejalA de Economía y Hacienda, Sandra Rodríguez, y el resto del grupo de gobierno confunden fracaso social con éxito económico.

A juicio de la ACP, no sirve de nada presumir de los datos económicos si éstos se consiguen a costa de priorizar el pago de los intereses bancarios a la satisfacción de las necesidades de la ciudadanía. Así, la Asamblea considera lógico que se mejoren las cuentas si no se dispone de personal suficiente para gestionar las ayudas de la Prestación Canaria de Inserción (PCI), si solo se tienen dos trabajadores sociales de base, si se eliminan todas las ayudas a estudiantes, clubes y colectivos, si falta personal para elaborar los presupuestos, si no se sustituyen las jubilaciones, si hay tantos funcionarios en comisión de servicios, si se imponen recortes a los trabajadores municipales, si se aumentan los impuestos, si las calles están sucias, si se mantienen cerrados el polideportivo de La Vera y las dos piscinas municipales, si el estadio El Peñón continúa sin luz suficiente, si el pabellón municipal sigue con goteras, si no se construye la nueva estación de guaguas y si no se arregla la playa de Martiánez, entre otros muchos problemas que afectan al Ayuntamiento y al municipio.

Asimismo, la Asamblea manifiesta su asombro ante la intención de Sandra Rodríguez de adelantar los plazos de pago de la deuda bancaria, ya que ello supondría a corto plazo una mayor asfixia para el presupuesto municipal y un mayor sacrificio para la población portuense, que ya lo está pasando suficientemente mal. El paso que, según la ACP, debe dar el grupo de gobierno es el de impulsar una auditoría de la deuda municipal, como han hecho otros ayuntamientos en España para dilucidar qué parte de esa deuda es legítima y cuál no. En cualquier caso, la Asamblea Portuense afirma que se podría compatibilizar desde ya la reducción de la deuda con la mejora de los servicios públicos si se redujera el gasto en salarios del alcalde, concejales y asesores, si se controlaran adecuadamente las concesiones administrativas para cobrar el canon establecido en cada caso, si se recaudara lo correspondiente al suelo público que se ocupa y si el Ayuntamiento no perdiera la gran mayoría de los juicios en los que interviene.

De igual forma, la Asamblea Portuense sostiene que, si bien es cierto que el plan de ajuste reduce la capacidad de acción del gobierno municipal, éste se lo ha saltado cuando le ha interesado y no ha pasado nada, ya que, en la práctica, el Ministerio está dejando cierto margen a los ayuntamientos. Así, la ACP recuerda que el gobierno portuense ha incumplido medidas importantes del plan, como la potenciación de la inspección tributaria, la reducción de los contratos menores o la auditoría de recursos humanos, por lo que considera que, si hay margen para hacerlo cuando le interesa al grupo de gobierno, también lo hay cuando le interesa a la ciudadanía.

En consecuencia, la Asamblea Portuense señala que, en este contexto, solo se entiende la reducción de la deuda como un avance si se considera más importante pagarle a los bancos que cubrir las necesidades de la población y frenar el deterioro de los servicios públicos. En este sentido, la formación subraya la importante cuota de responsabilidad del PP y el PSOE en que se haya llegado a esta situación en este y en otros muchos municipios, ya que la reforma de la artículo 135 de la Constitución impulsada por ambos partidos impuso la prioridad del pago de la deuda a cualquier otro pago, incluido el gasto social. Gracias a ellos, los impuestos que pagamos se destinan a pagar a los bancos y no a las necesidades de los portuenses.