Mohamed Jamil Derbah, asesor de la Presidencia de Guinea Bissau: “el EI basa su poder en el tráfico de drogas y en el de armas y en destruir a todo el mundo”

El control de fronteras y de emigrantes es clave para evitar que actúe en Europa

EDDC.NET / Adeje

El asesor de la Presidencia de Guinea Bissau, Mohamed Jamil Derbah, sigue con mucho interés, desde su atalaya en el municipio de Adeje, todo lo relacionado con el Daesh, que es el nombre árabe con el que se conoce a la organización terrorista que en estos momentos es la mayor amenaza a la paz mundial: el Estado Islámico.

Derbah, como ya ha expresado anteriormente, sigue insistiendo en la unión de todos los países árabes para acabar con el Daesh, aunque reconoce que la implicación de Rusia en el conflicto sirio ha significado un antes y un después en la lucha de los países occidentales contra este terrorismo yihadista.

Pero la unión de los pueblos árabes debe ir acompañado de acciones que descubran verdaderamente lo que es Daesh y lo que pretende, porque, “conociéndolos y poniéndolos en evidencia, los musulmanes podrán saber que sus valores nada tienen que ver con el Islam y que su presencia en cualquier país es sinónimo de muerte y destrucción, que lo único que desean es el poder y que harán todo lo posible por conseguirlo”.

El asesor presidencial deja claro que “el EI basa su poder en el tráfico de drogas y en el de armas y en destruir a todo el mundo, sea cual sea su condición, chíita, sunita, cristiano, musulmán, lo que sea, da igual, a todos extermina por igual. Ese afán destructivo debe ponernos a todos en marcha, en sumar esfuerzos”.

Derbah precisa que, “tenemos constancia del uso de drogas para tener a los combatientes del Daesh en un estado en el que sean capaces de cometer todo tipo de atrocidades y por eso promocionan y permiten el narcotráfico en todos los sitios en los que operan, cosa que consiguen gracias a sus fuentes de financiación, entre otros, la venta de petróleo ilegal”. Para eso además están metidos de lleno en el tráfico de armas, lo que les da posibilidades ante sus actuales enemigos y mantener los conflictos en Siria, Irak, Libia, Yemen y otros países africanos”.

El asesor presidencial lo tiene muy claro: “hay que cortar el narcotráfico que abastece al Daesh, golpear a los vendedores de armas que negocian con el Estado Islámico y por supuesto su financiación, descubriendo quien y quienes los ayudan económicamente y castigarlos si es preciso”.

Para eso Derbah pide a los países occidentales que “diferencien claramente a los musulmanes de los terroristas y que cualquiera que apoye a los yihadistas debe ir a la cárcel, sin contemplaciones, no importando quien sea y lo que sea”. Esta actitud es clave, porque lo que la opinión pública occidental ignora es que, “el Daesh está dañando seriamente las posibilidades de desarrollo de los países árabes, ya que por donde pasan, acaban con todas las estructuras económicas que no sean aquellas de las que puedan sacar beneficio inmediato”.

La crisis migratoria

El asesor presidencial también tiene palabras para el fenómeno migratorio, especialmente el derivado de la crisis siria, que supuso en su momento un duro golpe a la UE, que se vio desbordada en sus fronteras y que aunque no con la misma intensidad, sigue teniendo ante sí este problema.

Derbah, haciéndose eco de informes de las autoridades europeas policiales y de inmigración, los cuales señalaban la posibilidad que con ella entrasen en  el espacio europeo, terroristas islámicos, afirmó que, “deben reforzarse los controles y sobre todo proceder a articular una política de identificación de todas las personas que vienen a Europa desde los países en conflicto, no importando su condición y hacerle un seguimiento, de tal modo que por un lado se ataja las acciones de las mafias que usan a los inmigrantes ilegales y por otro, tener a mano la información que permita luego, evitar atentados, como los que ocurrieron en París. Un modo seguro es contar con la colaboración de las personas de mayor relieve social que van en estas corrientes inmigratorias y que sean ellas, las que, cuando estén en los puestos fronterizos, se encarguen de identificar plenamente a todos”.

Esta acción sería clave, ya que se dispondría de toda la información, a la que, como asegura Derbah, “hay que añadir la información policial y la de los servicios de inteligencia, para evitar que el Daesh dañe Europa, con todo lo que eso significa”.

El asesor de la Presidencia, Mohamed Jamil Derbah, concluye que, “estamos en el buen camino, porque ya conocemos mejor las verdaderas intenciones del Daesh y la comunidad internacional está haciendo todo lo posible para acabar con esta lacra, que mancilla el honor de todos los musulmanes de buena voluntad, que odian este ejercicio, “brutal y despiadado del terror, que solamente busca la destrucción y la pobreza”.