Conducir sin la tarjeta ITV: ¿Qué consecuencias tiene?
No contar con dicho documento traerá multas, o inmovilización del vehículo, y nadie querrá pasar por ello
EDDC.NET/Madrid
Al manejar un vehículo, es crucial que cada persona cuente con la documentación que le acredite para hacerlo. Normalmente, se lleva el carnet de conductor y permiso de circulación, pero ¿Qué hay de la tarjeta ITV?
Lamentablemente, existen quienes no le dan suficiente importancia, cuando en realidad la tiene, porque con esta se certifica que el vehículo cumple con todos los requisitos que establece la ley.
No obstante, siempre habrá personas que no las llevaran consigo, porque la dejan de lado, las olvidan o simplemente porque no se han ocupado de pasar la ITV, lo cual es un error.
No contar con dicho documento traerá multas, o inmovilización del vehículo, y nadie querrá pasar por ello. Entonces, sea por estas razones, en las que profundizaremos, o por otras, cada quien es responsable de cumplir con dicho aspecto que exige la ley para circular, y lo mejor es que no es complicado sacarla.
No llevarla es sinónimo de multas, principalmente
Circular sin la tarjeta ITV puede derivar en una serie de sanciones económicas que varían según la gravedad de la infracción y la normativa de cada región. En España, la multa por no llevar la tarjeta ITV es normalmente de 200 euros.
Esta sanción se aplica incluso si el vehículo ha pasado la inspección pero el conductor no puede presentar el documento cuando es requerido por las autoridades. Además, si la ITV está caducada o no ha sido pasada, la multa es aún mayor, alcanzando los 500 euros.
Circular sin la ITV no solo es una infracción administrativa, sino que también pone en riesgo la integridad del conductor, pasajeros y otros usuarios que se encuentren alrededor. Por ende, es responsabilidad de cada quien no ser un problema en este sentido.
La posibilidad de que retengan tu vehículo, existe
Además de las multas económicas, una de las consecuencias más severas de conducir sin la ITV es la posibilidad de que las autoridades retengan tu vehículo. Si durante un control rutinario de tráfico se detecta que tu vehículo no tiene la ITV vigente o que no puedes presentar la tarjeta, los agentes tienen la potestad de decidir si es prudente inmovilizar el coche o no.
Esta medida se adopta como una forma de prevención para que no pasen accidentes, y se garantice que los vehículos que circulan cumplen con los requisitos mínimos de seguridad. Pensemos por un segundo que sería terrible que por no estar al día con la ITV, una o más vidas quizás se pierdan en accidentes, cuando era total o casi por completo evitable.
La retención del vehículo es sinónimo en la necesidad de contratar un servicio de grúa para trasladarlo hasta una estación de ITV o taller autorizado, lo cual genera un gasto adicional significativo. Además, el tiempo que tu coche permanece retenido puede afectar tus actividades cotidianas, especialmente si dependes del vehículo para trabajar o realizar tareas diarias.
Entonces… Mejor saca tu tarjeta ITV
Para evitar estas molestias y sanciones, lo mejor es asegurarse de tener la ITV al día y llevar siempre la tarjeta en el vehículo. El proceso para obtener la misma es sencillo y se puede resumir en los siguientes pasos:
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Prepara tu vehículo. Si llevas tu vehículo a la estación ITV y no se ha preparado antes para pasar la misma, tendrás que repetir el proceso, perdiendo tiempo y dinero. Entonces, prepara el vehículo en cuestión, de preferencia con servicios de profesionales como hallas en https://imd-ingenieria.com/.
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Reserva una cita. Puedes programar una cita fácil en la estación ITV más cercana a través de su página web o por teléfono.
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Pago de la tasa. El costo de la ITV varía principalmente con base al tipo de vehículo. Asegúrate de conocer el importe y llevar el dinero necesario o tarjeta de pago.
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Documentación necesaria. Lleva contigo la tarjeta de inspección anterior, el permiso de circulación y el seguro del vehículo. Estos documentos son imprescindibles para realizar la ITV, pues es parte del proceso.
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Realización de la ITV. Durante la inspección, los técnicos revisarán diversos aspectos del vehículo para mirar que cumpla con los estándares de seguridad y medioambientales.
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Recepción de la tarjeta. Si el vehículo pasa la inspección, recibirás una nueva tarjeta ITV que deberás llevar siempre en el coche. En caso de que no la pases, se te indicarán las reparaciones necesarias y tendrás un plazo para realizarlas y volver a la inspección.