A mí que me lo expliquen

Francisco Javier González (*)

Debe ser que, como se dice por estos lares, no doy pa’más y debo ser durillo de mollera. Por eso quiero que alguien –preferiblemente de esos sabios de librea del gobierno autónomo o los sesudos mercachifles del gobierno colonial- me explique este fenómeno a todas luces paranormal de esos de películas de abducidos y esas vainas.

Cuba, tiene hoy  más de 11’5 millones de habitantes, 60.000 plazas hoteleras oficiales y unas 20.000 particulares, una amplia oferta de restauración oficial y además unos 3.000 paladares o restaurantes privados.  Recibió un total ligeramente superior a los 3 millones de turistas en 2015 con una estancia media de 6,5 días y unos ingresos estimados por ese concepto de unos 2.700 millones de dólares USA  -“oficialmente” se cambiaron divisas ($ o Eu) por valor de 2.600 millones de pesos convertibles- aunque seguro que no todos se habrán gastado porque yo mismo tengo algunos pa’l próximo viaje. 

Esas cifras, que son solo las suministradas por el ministerio de Turismo (Mintur), suponen para Cuba que el turismo constituya el tercer mayor capítulo de ingresos nacionales tras el azúcar y el tabaco,  un verdadero dinamizador de la economía cubana global y, como dicen los entendidos, un enorme “nicho de empleo”  pa’los cubanos.

Otro caso. Egipto, no hoy que sus cifras se han visto reducidas al 50% por el terrorismo del Daesh sino en el año de su auge, el 2010, recibió unos 14 millones de turistas que dejaron alrededor de 12,5 millones de $ USA y, en ese entonces esos ingresos constituyeron algo más del 10% del PIB egipcio.

Pues bien, según publican, solo Tenerife generó en 2015 4.046 millones de euros como ingreso de los 5.186.488 turistas que nos visitaron para un total de 899.000 habitantes, cifras económicas casi el doble que las de toda la isla de Cuba para sus  11,5 millones de cubanos y algo menos de la mitad del mejor año turístico del enorme Egipto con sus 87 millones de habitantes, me pregunto ¿qué nos está llegando a los canarios de la ingente cantidad de dinero que genera el turismo?

A cada tinerfeño nos tocarían unos 4.500 euros al año ¿Cuánto de eso se está invirtiendo? ¿Qué % de esos ingresos se quedan en el país y cuanto se drena para fuera? Y, del que se queda aquí ¿a que manos va a parar? Si ahondamos más pasaríamos a preguntarnos: de los empleos generados por esa industria ¿cuantos son para canarios o residentes de años en el país y ya, por ello, “canarizados”, y cuantos para personal foráneo de aluvión? Y, pa’más inri, los españoles cuando hablamos de independencia nos dicen ¿y de qué van a vivir?

En fin. Cosas del coloniaje, me digo a mí mismo,  pero eso me obliga a otra pregunta ¿Hasta cuando lo soportaremos?

(*) Exsecretario de Frepic Awañak