CESM Tenerife valora el seguimiento de la huelga con moderada satisfacción

El seguimiento del paro lo estimamos en un 40% en las islas de nuestra provincia

EDDC.NET / Santa Cruz de Tenerife

Este seguimiento ha sido más bajo de lo esperado debido a la mala gestión de la información de los servicios mínimos por parte de la consejería de Sanidad del gobierno de Canarias, los cuales han sido comunicados pocas horas antes de su incorporación al puesto de trabajo, cuando se debieron comunicar con 2 ó 3 días de antelación, y por la imposición del 100% de los efectivos.

El desaliento que mueve a los profesionales actualmente, con meses de durísimo trabajo a sus espaldas, con años acumulando restricción de derechos y con una ‘solución’ reciente como parche temporal que viene a dar la puntilla a la calidad del enarbolado como uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo.

El desprecio por parte de los responsables de la Administración a la labor de los médicos ha quedado patente en estos difíciles meses, donde pese a innumerables peticiones de reunión, el ministerio de Sanidad ha hecho oídos sordos a las mismas.

El ministro de Sanidad, en plena pandemia sanitaria se ha negado desde el principio a recibir a nuestros representantes nacionales.

Ningún momento es bueno para una huelga médica, que además evidencia, en esta ocasión más que nunca, un fracaso de la negociación, un contacto que ni siquiera han tenido a bien intentar con el Comité de Huelga designado. Este paro, que tendrá lugar el último martes de cada mes, se produce por la situación insostenible por la que atraviesan los médicos en esta llamada segunda ola de la pandemia mundial por la Covid-19.

La primera se sobrellevó como se pudo gracias al trabajo y el esfuerzo de los profesionales, pese a perder a demasiados compañeros por el camino que primaron la atención a los pacientes por encima de su propia seguridad. Las graves carencias que afectaban al sistema sanitario se hicieron patentes entonces y tras apenas dos meses de tregua no sólo no se han tomado medidas que las subsanen, sino que se ha procedido a desmantelar el sistema como lo conocíamos hasta ahora.

Esta huelga es una llamada de auxilio secundada por toda la profesión médica, pero también tiene como objetivo velar por la seguridad de los pacientes, que tras la aprobación del Real Decreto Ley 29/2020 van a ver cómo son atendidos por médicos sin la titulación de especialista necesaria para trabajar en el SNS o incluso por profesionales de otras especialidades, denostando -más aún- la Medicina Familiar y Comunitaria, colapsada desde hace meses. El decretazo, como ya hemos denunciado con insistencia, supone el golpe definitivo para provocar el hundimiento del sistema de Formación Especializada que rige con éxito en España desde 1978.

Desde CESM sólo estamos canalizando el descontento de miles de médicos que tras años de formación y esfuerzo están al límite de sus fuerzas y miran incrédulos la gestión que los responsables políticos están haciendo de la pandemia, mientras son ellos quienes tienen que enfrentarse cada día, en cada turno de trabajo, a decenas de pacientes, con cifras disparadas de enfermos de Covid pero también con todo el resto de patologías con necesidad de atención sanitaria.

Una vez más recordamos que el objetivo de esta huelga es la retirada del Real Decreto Ley 29/2020; la dignificación de la Atención Primaria, con unos cupos de pacientes racionales y dotación de una plantilla adecuada a las responsabilidades y demandas poblacionales; estabilización de las plantillas, que en Canarias sufren desde hace décadas más de un 70% de eventualidad con contratos precarios.

Además pretendemos abrir un canal de diálogo con los profesionales que pueda aportar soluciones consensuadas a los problemas que arrastran desde hace años. La llave para desconvocar este paro está en poder de las administraciones.