El Cabildo crea un Grupo de Acción para luchar contra el cambio climático y adaptarse a sus consecuencias

Las emisiones han subido un 55 % en Canarias frente al 15 de España 

EDDC.NET / Las Palmas de Gran Canaria

El Cabildo de Gran Canaria ha creado el Grupo de Acción Climática, cuyo objetivo no solo es tomar medida para frenar el calentamiento, sino adaptar la isla a sus consecuencias, algunas de ellas cada vez más notables, como el giro de los alisios, la llegada de la ciguatera y manchas de algas o los temporales.

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, subrayó durante la presentación de esta nueva iniciativa que responde a que el grupo de gobierno considera fundamental diagnosticar con precisión los impactos de las emisiones, así como aplicar medidas de reducción que permitan preservar los intereses estratégicos de Gran Canaria y su población, además de adaptarse a sus afecciones.

El Grupo de Acción Climática está compuesto por el presidente y por el vicepresidente segunda de la Corporación, Juan Manuel Brito, el también consejero de Medio Ambiente, además de los titulares Desarrollo Económico, Sector Primario y Soberanía Alimentaria, Transporte, Energía, Industria y Obras Públicas, y abierto a entidades sociales que han trabajado durante años para frenar el calentamiento, subrayó Brito, quien recordó que responde también al acuerdo plenario tomado por unanimidad en noviembre pasado.

El experto Ezequiel Navío será el coordinador técnico de este nuevo ente, el único de Canarias para afrontar esta situación, quien alertó de que mientras Europa ha bajado las emisiones, España las ha incrementado un 15 por ciento y Canarias supera aún más esta media con un 55 por ciento de aumento a pesar de que los territorios insulares serán los más afectados del planeta.

Los motivos son el altísimo uso de combustibles fósiles para generar electricidad, lo que lleva a generar emisiones las 24 horas de los 365 días del año, albergar uno de los mayores parques automovilísticos de España, así como el enorme tráfico aéreo y marítimo interinsular e internacional.

Los primeros pasos

El primer paso será fijar el funcionamiento interno, así como recopilar los informes existentes, de gran profusión técnica y calado, resaltó Navío, para poder definir a partir de ahí los campos en los que actuar y qué acciones emprender, es decir, un plan de acción para los próximos cuatro años.

La subida de temperatura del mar acidifica el agua, así que uno de los focos estará en sus consecuencias económicas para las pesquerías, además de las afecciones en sanidad por la entrada de nuevas enfermedades relacionadas con las nuevas condiciones, o las consecuencias por la entrada de flora y fauna invasiva.

La elevación del nivel del mar en una tierra “en la que se ha fabricado casi hasta la orilla” no es nada desdeñable, subrayó el presidente, y aunque de momento el registro es de un centímetro, ya hay islas del Pacífico y el Índico previendo la necesidad de trasladar su población cuando queden totalmente inundadas debido a las subidas que se esperan.

Sin medios para afrontar mareas negras

En cuanto a los  medios para afrontar mareas negras, toda vez que el tráfico de petroleros en Canarias es uno de los más importantes del mundo, Navío recordó que Canarias no está preparada y que los episodios registrados en los últimos años han tenido que ser atendidos con medios humanos y materiales de los municipios afectados, que han tenido que movilizarse “para sacarlos literalmente de debajo de las piedras” a pesar de ser una competencia regional y estatal.

Una de las mayores amenazas para la humanidad

El cambio climático representa una de las mayores amenazas para la humanidad y  la seguridad mundial, tal y como reconoce la Secretaría General de Naciones  Unidas. Los impactos globales del incremento de temperatura por la acción de gases de efecto invernadero son patentes ya en múltiples lugares del planeta. La comunidad científica prevé que la inercia de sus efectos genere consecuencias “muy severas” en este siglo XXI para muchos territorios y  comunidades humanas de todo el mundo.

La Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático alerta además sobre la gravedad de los impactos de este fenómeno en territorios insulares y costeros del planeta, posicionándolos en una destacada situación de vulnerabilidad. Este factor se ha evidenciado de forma notoria en la última Cumbre del Clima (COP21) celebrada a finales de 2015 en París, cuyos acuerdos* fueron suscritos por 196 Partes (195 países más la Unión Europea).

Tras la extinción de la Agencia Canaria de Desarrollo Sostenible y Cambio Climático en julio de 2012, Canarias no disponía de organismo alguno dedicado a esta materia que es reconocida social, científica y políticamente como uno de los mayores retos para la población mundial, y aunque lo deseable es que el archipiélago contara con un organismo de estas características, Gran Canaria no ha querido esperar, concluyó Morales.