Asociación Kairós: un esfuerzo solidario con los más pobres

Un año más, y de forma puntual, la Asociación Kairós, cuyo presidente es Benjamín Barba, expone su  informe de evaluación y análisis referido al 2016. Por todo ello, cerca de un 30% de nuestra sociedad vive en el umbral de la pobreza, sin que los gastos básicos como la vivienda, agua, electricidad, alimentación, vestido, medicina, transporte, etc., estén cubiertos para vivir con dignidad. Alrededor de un 30% de la población tinerfeña vive en el umbral de la pobreza, donde ni siquiera tienen cubiertas sus necesidades básicas. Cuando la Asociación Kairós comenzó a repartir alimentos en 2010, a personas derivadas por los servicios sociales del Ayuntamiento de Santa Cruz, el perfil de la población atendida, eran familias pertenecientes a la clase trabajadora que habían tenido la desgracia de perder su puesto de trabajo, habían agotado las prestaciones sociales por desempleo, y se encontraban en la necesidad de cubrir sus gastos básicos. En muchas ocasiones, la pérdida no fue únicamente la del trabajo y de las prestaciones sociales. También, con el tiempo, muchos perdieron la vivienda, el vehículo. En la mayoría de los casos fueron arropados por la familia (los ascendientes), especialmente por los padres que, con sus pensiones, podían ir cubriendo los gastos más perentorios, el realojamiento en la casa paterna, los alimentos, productos de higiene, ropa, etc.

En dicho informe, prosigue: en la mayoría de los casos, la imposibilidad de encontrar trabajo, motivó que esa pobreza se fuera cronificando, perdiendo las expectativas de encontrar un empleo que nuevamente pudiera proveer de los fondos económicos suficientes para salir de dicha situación. Luego, se perdieron las habilidades básicas aprendidas y desarrolladas en la experiencia laboral, que incapacita a una persona para su reinserción laboral cuando surge alguna oferta de trabajo. En muchos casos, perdieron la esperanza de volver a vivir con dignidad: encontrar un trabajo con un salario digno. Se pasó de una expectativa de que las ayudas en alimentos que estaban recibiendo era algo puntual, al desaliento y a “tirar la toalla”. Este cambio está provocando una dependencia, casi asistencial. Alrededor del 30% de personas a las que atiende la Asociación Kairós, se encuentra en esta situación (consultar datos estadísticos aportados). Para la Asociación Kairós, la “normalización” de esa pobreza se aprecia en cada reparto de alimentos al tratar, cada vez más, a personas que encuentran trabajos puntuales e inestables, en el que tienen que hacer más horas de las que recoge el contrato, si lo hay, y que, finalmente, llegan a percibir entre 500  o 600 euros al mes. Evidentemente, con esos salarios es imposible cubrir los gastos básicos de vivienda, alimentación, vestido, transporte, material escolar etc. De esta forma, se puede entender que la sociedad y los propios afectados han normalizado su situación de pobreza.

En lo que respecta a los datos generales de 2016.  La Asociación Kairós atendió, a 1.010 familias diferentes, siendo un total de 2.981 personas. Del total de estas personas, 876 son menores de 15 años (29,4%), 141 son mayores de 65 años (4,7%); y 176 personas son inmigrantes (5,9%). La media por unidad familiar es de tres personas y las unidades familiares con menores de 15 años a su cargo ascienden a 514 (50,9%) del total. Las personas a las que atiende la Asociación están en una situación económica muy desfavorable, ya que, como hemos señalado, en algunos casos no reciben ningún tipo de prestación económica o la cantidad que perciben es tan mínima, que no les permite afrontar los gastos básicos para la supervivencia. Respecto a los datos acumulados, se hicieron un total de 6.289 lotes de entregas de alimentos, de forma proporcional al número de miembros que componen la unidad familiar. Esto significa que, a mayor número de miembros que componen la unidad familiar, mayor es la cantidad de alimentos entregada.

Los alimentos entregados en 2016 fueron un total de 286.874 kilos, lo que equivale a una media de 96 kilos de alimentos por persona y año. Un dato que nos ayuda a entender cómo se ha ido normalizando la pobreza durante 2016, es la frecuencia con la que las familias han venido a recoger alimentos. De las 1.010 familias atendidas, 170 unidades familiares (16,9%) lo han hecho cada mes. Las que han venido en once ocasiones son 78 (7,8%). Las que han venido en diez ocasiones son 48 (4,8%). Esto supone que casi 300 familias (29,3%) han venido de forma regular, diez o más meses al año. En contraste, están las que han venido en menos ocasiones, especialmente las que solo han venido en una ocasión que son 120 (11,8%) y, de éstas, 24 han venido por primera vez en diciembre de 2016. Las familias que han venido en dos ocasiones ascienden a 112 (11%) y las que han venido en tres ocasiones son 93 (9,2%), sumando un total de 325 unidades familiares (32,0%). Finalmente, las unidades familiares que han venido entre cuatro y nueve ocasiones ascienden a 389 (38,5%). En este sentido, desde la Asociación, “creemos entender que lo normal sería que una familia que se encuentra en una situación de precariedad, viniera, una, dos o quizá tres veces, pero la tendencia nos indica que cada vez son más las familias que vienen de forma regular a buscar alimentos, lo cual nos lleva a pensar que la pobreza está cronificada en muchas de estas familias”. En comparación con 2015, ha habido un aumento del 12,2 % de familias atendidas, ya que, en ese año, fueron 900 familias diferentes las atendidas, y un total de 2.823 personas diferentes; mientras que en 2016 el número de unidades familiares atendidas fue de 1.010 y el de personas 2.981 (un 5,6% más).

Para la Asociación Kairós, este incremento es preocupante, ya que, con la “supuesta recuperación económica” que se está produciendo desde hace tres años (2014-2016), las unidades familiares atendidas deberían haber descendido notablemente, y esto no ha sucedido. Funcionamiento desde inicios de 2010: los voluntarios de la Asociación Kairós vienen realizando una labor social de entrega de alimentos, con el objetivo de ayudar a las personas más desfavorecidas de nuestro entorno, tanto de la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, como de poblaciones limítrofes. Este trabajo se realiza en coordinación con los Servicios Sociales del IMAS de Santa Cruz de Tenerife. En 2016 nos derivaron a 906 unidades familiares, lo que supone 89,7% del total de familias atendidas. También colaboramos con diferentes ONGs, que desarrollan diversos proyectos sociales con el Cabildo de Tenerife o el Gobierno de Canarias. Estas ONGs tienen un trabajador social colegiado y nos deriva a sus usuarios para que les apoyemos con alimentos. En este grupo hemos atendido a 94 unidades familiares, lo que supone el 9,3% de la totalidad. Algunas de estas ONGs son: La Casita, Mundo Nuevo, Funcasor, Mujeres Solidarias, etc. Desde el área de Asuntos Sociales del Gobierno de Canarias, también nos derivaron a 10 unidades familiares para que les proporcionáramos alimentos lo que supone el 1% del total atendido. El procedimiento de trabajo que seguimos es que estos profesionales, los Trabajadores Sociales, derivan a las personas a la Asociación con un documento firmado en el que se recoge la necesidad de ayuda de estas unidades familiares. Este documento lo tienen que renovar periódicamente según evoluciona la situación socioeconómica de dicha unidad familiar. Por último, la Asociación Kairós agradece a todas las personas (particulares), empresas privadas, e instituciones gubernamentales, que han ayudado a realizar este trabajo de voluntariado por y para el bien de la sociedad tinerfeña. Así pues, ahí queda el trabajo de una Asociación humanitaria que insiste cada año en seguir ayudando a los más necesitados. Sin duda, todo un ejemplo de solidaridad y de compromiso de forma altruista.KAIRÓS